El ritual
"Nota: Puedes meterlas en el congelador o en la nevera para enfriarlas. Para calentarlas lo ideal es que utilices una esterilla eléctrica. No las calientes en el horno o microondas. Limpia tus Chill Wands con un jabón suave y un poco de agua después de cada uso. Luego sécalas bien y guárdalas en su caja. "
La crioterapia altamente dirigida fomenta la entrega de nutrientes y una mayor desintoxicación de los desechos celulares. Se pueden disfrutar congeladas (congelador) o frías (refrigerador). Cuando se usan en tibio o en caliente, sobre tratamientos como mascarillas o serums, la penetración del producto aumenta significativamente y produce una calma profunda si se realiza antes de acostarse.
Utiliza siempre Chill Wands sobre la piel limpia. Aplica tónico y aceite facial antes de usar, la idea es que la herramienta se deslice fácilmente sobre la piel. Empieza en el medio de la frente y desliza ambas varillas hacia las sienes. Trata el contorno de los ojos cansados y reduce la inflamación, deslizando los extremos de la herramienta desde el interior de los ojos sobre los párpados hacia las sienes. Luego continúa con movimientos circulares hacia arriba y alrededor de los ojos / cejas. Contornea las cejas deslizando el lado redondeado sobre los arcos de las cejas hacia las sienes y levantándolas suavemente. Para tensar las mejillas, desliza las varillas desde las esquinas de la nariz hacia las orejas. Libera la tensión de la mandíbula guiando las herramientas desde las comisuras de la boca hasta las orejas. Para activar correctamente el flujo linfático, pasa los Chill Wands desde el centro del mentón a lo largo de la mandíbula hacia las orejas. Finalmente, acaricia el cuello con movimientos largos de arriba hacia abajo. Realiza cada movimiento 10 veces.
Formulado con ingredientes naturales y orgánicos certificados. Sin parabenos, ftalatos, fragancias sintéticas o sulfatos de sodio. Libre de crueldad animal.
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